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lunes, 23 de junio de 2014

Cuando sali de Cuba.




Hoy hace 18 años que salí de Cuba. Y ya no sé dónde está mi corazón!. Si en Cuba, Barcelona o en la Toscana.

A este punto, creo que será mejor compartirlo con todos estos lugares que han sido testigos de mi vida hasta la actualidad.

En fin, seguimos adelante, eso si, siendo cubana 100% y que nadie lo dude !.

                                                                       
                                                                                  Tamara Terré Morell.

 

jueves, 19 de junio de 2014

Cualquier semejanza es pura coincidencia.




Mi vida en la Toscana es real, pero se me antoja que tiene similitudes con la película.

He comprado casa en un país extranjero, he heredado un pequeño terreno con olivo y árboles frutales, una bodega de vinos con tantas botellas vacías, colecciones de enciclopedias    y un montón de inquilinos, en cuanto a animales se refiere. En el post de octubre 2013 ya hice referencia a los diversos insectos y hasta serpientes que he visto desde que vivo en la Toscana, por no mostrarles todos los muebles, lámparas y objetos viejos con encanto que encontré cuando vine a esta casa.
 
 Las casas viejas tienen sus inconvenientes como bien dicen en la película pero yo me entretengo a arreglar por aquí, por allá, a restaurar baúles, sillas, muebles y sucede que el día menos pensado llega esa sensación que te deja bien claro que ésta es tu casa.
 
 
Al inicio de estar aquí cada vez que debía ir sola a la bodega, no crean, no soy miedosa, ni creo en los fantasmas pero joooooo ... me entraba un cosquilleo en el estòmago, mi cabeza empezaba a imaginar y me venia a la mente lo que me dijo el señor que vendió la casa: - Ten mucho cuidado cada vez que entres y salgas de la bodega, los cambios de temperaturas no son buenos, aquí vino mi prima un verano, cogió una pulmonía y se murió. Madre mía, con esos mensajes!
 
Luego, me tocó subir a la buhardilla con la intención de dar una ojeada y lo que encontré fue mucho: los muebles llenos de bichos del bisabuelo, cuadros, muy viejos, con figuras religiosas que no pude salvar, tiendas de acampadas de todo tipo y de todas las épocas, por no hablar de los ratoncitos traviesos que alli vi. A los "contadinos", personas del campo toscano no les gusta botar, ni tirar  nada, aprovechan todo, pero les gusta acumular demasiadas cosas que al final nunca en la vida usarán.
 
Amigos  mios, esto y mucho más podría contarles de mi película personal Bajo el sol de la Toscana, recordándoles que cualquier semejanza es pura coincidencia.
 

 
 
                                                                         Tamara Terré Morell.
                                                                         Fotos de Tamara T.M.
                                                                         Video de YouTube.
 
 

domingo, 15 de junio de 2014

Chin, chin .... la lluvia cayò.

Este tiempo está loco!. Es lo primero que oigo cada vez que se produce un cambio de temperaturas. Ahora llueve, escampa, sale de nuevo el sol, de repente viene un aire que te lleva y así pasan las horas.
 
Hasta hace dos días teníamos un calor africano, como dicen aquí en Italia. No obstante, ayer cayó un agua que me recuerda a mis aguaceros de Cuba.
 
Por suerte, mis tomates van creciendo y esta agua les va de maravillas. Ahora mismo hace un fresquito rico, rico ...
 
Menos mal que el calor nos ha dado una tregua, pero los que están deseando ir a la playa no estarán muy contentos.
 
 Estamos en verano, y en verano hace calor, y en verano se va a la playa, pero en verano también llueve. Por eso, cuando esto suceda, hàgase la idea de estar en la playa y disfrute del momento dándose una buena mojadita en el aguacero.
 
 Por si no lo saben, los cubanos somos expertos en bañarnos en los aguaceros. Desde pequeños salimos para la calle con los amigos y allí jugamos, corremos y hasta bailamos bajo el agua. Recuerdo cuando llegué a Barcelona que empezó a llover y que la gente corrían como locos buscando un lugar donde cobijarse. Yo, habituada a mojarme, en ese momento sentí una nostalgia tremenda de no estar en mi Cuba donde con la cantidad de agua que caía daba tiempo hasta para lavarte los cabellos en el patio de tu casa. Y no digo mentira. 
 
Vacaciones  2009 en el patio de mi casa en Cienfuegos, Cuba.
 
Luego me dijeron que si me bañaba en el primer aguacero de mayo me pondría mas linda y ahí si que no fallo, me lo tomé al pie de la letra y hoy en día estoy muy atenta a ese aguacero y aquí tampoco digo mentira. ( lo de linda lo dejamos sin comentarios, je, je, je ....)
 
Ya la lluvia pasó y yo me despido con una expresión que usamos mucho los cubanos que dice: Agua, agua .... y repita Aguaaaa, aguaaaa .... pero, Sras. y Sres. pòngale un poco de acento y sabor cubano!.
 Dale, dale y repita de nuevo: Aguaaa, aguaaaa ....
 
Y con agua o sin ella los saludo, deseándoles a todos un buen verano.
 
 
                                                                    Tamara Terré Morell.
                                                                    Fotos de Tamara T.M.

jueves, 12 de junio de 2014

Cuando ondea mi bandera.

He decidido poner una bandera cubana en mi terraza haciendo honor al sobrenombre de  "Cubana en la Toscana".
 
Así mis amigos no se perderán para llegar a casa, recuerden que vivo en Siberia Profunda y el GPS no funciona.
 


Ahora los remito al post de noviembre de 2013 que contaba las cosas que suceden, mis vecinos, chismes y costumbres y les cuento:
 
Cuando han visto la bandera ! Qué por qué ponía una bandera? que si era temporal? qué de qué país era?.... a lo que han sumado: ahora debes poner una bandera italiana !
 
En fin, mis amigos, esto sucede por aquí, sin comentarios.
 
 No teman cuando el tom, tom (gps) les diga que ya han llegado, les digo yo que no. Deberán seguir un poco más adelante, girar a la derecha cuando vean una iglesia muy pequeña y hasta que no vean la bandera cubana no paren. Recuerden que la calle está sin asfaltar, por lo que no hay más pérdida.
 
 
 
Sólo entonces verán mi linda bandera ondear, con el paisaje de la campiña toscana detrás y a partir de aquí cada uno es libre de pensar y de decir lo que quiera. Yo escucho.
 
 
                                                                         Tamara Terré Morell.
                                                                         Fotos de Tamara T.M.